Bueno, pues de las muchas obras del polifacético Maestro Jerry Goldsmith, siempre hay obras mucho más simples y menos elaboradas simplemente porque los requerimientos son así y el compositor siempre cumple. "6 Degrees of Separation" es, como bien dicen arriba, una obra que está basada en una estructura más teatral, con mucho dialogo. La música no tiene una función narrativa importante ni tampoco tiene fines emocionales o grandilocuentes: tiene la función ambiental pura y dura. Un tema principal para englobar la película y algunas piezas más bien simples para acompañar y dotar una escena de intensidad o para que el espectador pueda empatizar un poco con los personajes. Nada más.

Jerry Goldsmith decide abrir la partitura con el tema principal, siendo este un magnífico y pegadizo Tango a violín como instrumento principal y el piano como acompañamiento. Su ritmo es maravilloso y el comienzo del film con esta música no hace más que dar expectativas al espectador también imbuyendo a la película de un sentido de elegancia y particularidad muy interesantes.

Al conjunto de la obra se le añaden piezas más jazzísticas y un poco de temas cálidos y humildes, poco elaborados, a plena consciencia y alguna variación del tema principal. Es efectiva pero demasiado simple y en mi opinión, a falta de saber la petición del director al compositor aunque seguro que fue la de poner muy poca música, se podría haber creado algo mucho más sofisticado pero bueno, la elegancia está ahí y también el cumplimiento del deber de Golsdmith, quién nunca falla en su propósito. Y es una lástima porque a pesar de su efectividad y el maravilloso tango como tema principal, no se le puede poner una nota demasiado alta a una composición cuyos 34 minutos de duración son, en su mayor parte, trozos de guión y tan solo tres o cuatro piezas musicales además del tema principal. Así que para lo que es, para mi un 5 ya es demasiado alto.

5/10

El Goldsmith íntimo es a veces menos conocido y/o apreciado por algunos seguidores. Curiosamente, en su asociación con Fred Schepisi dio Jerry Goldsmith lo mejor de si mismo en pequeños tesoros prácticamente desconocidos. "Six degrees of separation" es uno de ellos. Obra maestra a reivindicar, con un inolvidable tango como motor de la partitura.