Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar tu experiencia y nuestros servicios, analizando la navegación en nuestro sitio web.
Si continuas navegando consideraramos que aceptas su uso. Puedes obtener más información en nuestra Política de Cookies.

Cerrar

THE LARGEST SITE OF FILM MUSIC REVIEWS IN THE WORLD! 23 YEARS ON INTERNET
37.737
BANDAS SONORAS
8.176
COMPOSITORES
7.559 OPINIONES DE USUARIOS
SÍGUENOS
USUARIO
 

EDITORIALES

CONÓCEME
CONSULTA ANTERIORES
ARCHIVO

COMPOSITORES EN FUNERARIAS

07/06/2024 | Por: Conrado Xalabarder

Por muy bueno que pueda ser el tanatoestético no siempre puede hacer más presentable al muerto, y hay compositores que lo intentan con todo el maquillaje del que disponen en sus partituras pero nada hay que puedan salvar: la película sigue siendo horrible. Cito como tantas veces a Adolph Deutsch y a su sarcástico un compositor de cine es como el empleado de una funeraria: no puede resucitar a un muerto, pero se espera de él que lo haga parecer más presentable. Y es cierto que no pocas son las veces en que eso se consigue, cuando excelentes bandas sonoras (en lo musical y/o en lo cinematográfico) hacen más visibles cadáveres como The Swarm (78) The Emoji Movie (17) o los últimos -y lamentables- melodramas de Korngold en Warner, entre tantísimos otros ejemplos que tumban la estúpida afirmación que con ignorancia aún se suelta en ámbitos académicos de que una mala película no puede tener una buena banda sonora.

Hay ocasiones, sin embargo, que la mala película tiene también una mala banda sonora, incluso con buena música, pues es evidente que una gran música es mala música de cine si no sirve de nada en la película que intenta construir. A veces no es por impericia del compositor sino por causas ajenas, como el desastre que han hecho con la música de Pascal Gaigne en El salto (24) o el que hicieron con la música de John Morris en The Doctor and the Devils (85), de la que esta semana lancé un vídeo para explicar, mostrar y demostrar lo mucho que perjudican las malas mezclas. Pero también pueden haber causas propias: la a mi entender malísima planificación musical de The Watchers (24), que se estrena hoy, es responsabilidad también del compositor, Abel Korzeniowski, pues cuenta con experiencia en el audiovisual allá donde la directora, Ishana Night Shyamalan, no tenía ninguna y al parecer nada aprendió de las lecciones de cine que se dieron en el cine de su padre con James Newton Howard: esta misma semana, también, hemos lanzado un vídeo para explicar, mostrar y demostrar la grandeza e inteligencia en la banda sonora de Unbreakable (00). ¿Por qué Ishana, además de clonarse tan mal con el cine de su padre, también ha clonado tan mal la música? ¿Y por qué Korzeniowski parece que en lugar de proponer -con su experiencia- parece haberse limitado a obedecer instrucciones de una inexperta?

Korzeniowski lo ha intentado pero no ha logrado hacer presentable al filme muerto: le falta oficio de funerario. No es el único, no son pocos los compositores que se lucen cuando el filme está muy vivo pero son incompetentes ante un cadáver aunque lo intenten con todo el maquillaje del que disponen en sus partituras. En la música de cine también hay que saber ser un buen maquillador de filmes muertos.

Compartir en
 
comentarios de los USUARIOS Deja un comentario
Deja un comentario
Atención Una vez publicado, el comentario no se podrá modificar. Publicar
No hay ningún comentario
 
de 0 a 5 Editoriales de 497
Siguiente
14/03/2025 | Por: Conrado Xalabarder
Creo que cualquiera que sepa del talento y exquisitez de Alan Silvestri debe lamentar verle involucrado en algo como The Electric State, que se estrena hoy en Netflix.
12/03/2025 | Por: Conrado Xalabarder
Hoy se cumplen cien años del nacimiento de uno de los más grandes compositores que ha tenido el Séptimo Arte, Georges Delerue.
07/03/2025 | Por: Conrado Xalabarder
Tras haber sido premiado con el Oscar por su segunda película, The Brutalist (24) ¿qué futuro en el cine le espera a Daniel Blumberg?
28/02/2025 | Por: Conrado Xalabarder
Es una pena que una película tan importante como Ainda estou aqui (en España Aún estoy aquí) tenga una música tan poco relevante, y más existiendo referentes de compositores que se implicaron con sus músicas en la denuncia de los hechos narrados.
21/02/2025 | Por: Conrado Xalabarder
Mel Gibson llevaba cinco películas dirigidas que tenían cinco bandas ejemplares, pero con la sexta se ha roto la inmejorable racha: Flight Risk (25), que hoy se estrena, cuenta con una banda sonora del montón.
de 0 a 5 Editoriales de 497
Siguiente