Alberto Iglesias es el compositor español de cine más laureado y reconocido mundialmente y sin embargo es de los que menos atención recibe de los aficionados, ya no solo comparado con colegas norteamericanos sino también en relación a otros compositores españoles. Iglesias es, en este ámbito, prácticamente un compositor ignorado. ¿Pero por qué?
Hoy se estrena Dolor y gloria, su nueva colaboración con Pedro Almodóvar. Aún no he podido verla pero a la mayor brevedad la reseñaré aquí en MundoBSO, como se corresponde a un lugar donde su labor es seguida, comentada, celebrada y también criticada. No hay ningún mérito en ello: la vocación de esta web es que esté absolutamente todo reseñado. Sin embargo, donde nosotros tenemos 38 comentarios publicados de sus bandas sonoras -ningún otro sitio web en el mundo tiene más material comentado- desde BsoSpirit informan que le han dedicado tres reseñas, y en Asturscore dan la cifra de también tres bandas sonoras suyas comentadas. Y en ambos lugares ninguna de una película de Almodóvar, cuando se trata del binomio más importante del cine español.
Es constatable pues que las otras dos grandes webs españolas que publican críticas (SoundTrackFest está excluída por no dedicarse a estos menesteres) no muestran interés por opinar sobre lo que crea Iglesias. Y sin embargo sí han dedicado -así me lo hacen constar- abundantes noticias sobre sus proyectos, premios, etc. Algo que se explica por la buena labor de quienes aportan contenidos en ambas páginas pero que en ningún caso da respuesta a la hiriente pregunta de por qué no tienen interés en comentar sus trabajos en el cine. No es mi pretensión cuestionar líneas editoriales ajenas, en absoluto, pero sí constatar un hecho que no solo sucede en esas webs sino a un nivel generalizado entre los aficionados: se lee en las redes sociales comentarios y debates sobre lo que hacen Baños, Velázquez, Gaigne y otros, pero de Alberto Iglesias son muy pocos los que hablan salvo para celebrar que es el compositor más internacional de nuestro cine.
No me equivoco en esta apreciación: dada su singular relevancia, y no solo por sus tres nominaciones al Oscar, debería ser uno de los que más visitas reciben en MundoBSO pero de hecho es, de entre los grandes, uno de los que menos consultas genera. Sus últimos trabajos han pasado prácticamente desapercibidos: casi nadie ha hablado de ellos. Esto, insisto, entre los aficionados y haciendo una comparación con otros compositores. Sin embargo quienes sí hablan de él y frecuentemente son los propios compositores, sus colegas, y generalmente en términos de admiración y respeto. Y naturalmente la prensa generalista y los medios de comunicación, con entrevistas en muchas ocasiones superficiales, con las preguntas de siempre, pero en otras con preguntas que muestran lo tan interesante que es este autor.
Pero hay una distancia con el aficionado. Tengo la impresión que se debe a que Iglesias no es un compositor de melodías fáciles y reconocibles, de las hechas para gustar, y que junto a la sofisticación de su música (y eso que no es un compositor complejo sino, al menos en el cine, llano y directo) puede que genere menos empatía y los aficionados lo vean un autor distante y de difícil explicación emocional. Pero yo sí creo que Iglesias es un compositor muy emocional, en un ámbito diferente al de las frases musicales claras e identificables, con obras más interesantes y otras que no lo son tanto, pero que genera material apasionante sobre el que disertar. En cuanto vea el filme de Almodóvar lo seguiré haciendo, ojalá se logre que muchos más aficionados también lo hagan.