La muerte de Michel Legrand pone cierre a una trayectoria musical gloriosa que en el cine se extendió durante sesenta años en los que este compositor francés, tan amante del jazz, creó algunas de las bandas sonoras más memorables de la Historia del Cine. ¿Por dónde empezar? Les parapluies de Cherbourg (64) sigue siendo, tantos años despúes, una auténtica maravilla de la música romántica y también dramática. Toda esta película, como también lo sería poco después la muy deliciosa Les demoiselles de Rochefort (67), dependió de la música: ambas se movieron y explicaron a partir de ella. Y de entre todas las canciones en ambas, sobresale para siempre la canción Je t'attendrai, título que le pongo yo puesto que en ese filme tal era la integración con la historia que director (Demy) y compositor decidieron que ninguna canción llevara título.
The Thomas Crown Affair (68) -ganador del Oscar por la memorable canción The Windmills of Your Mind-, The Happy Ending (68) con la extraordinaria What Are You Doing the Rest of Your Life?, The Picasso Summer (69) The Go-Between (71) Pieces of Dreams (71) y su canción homónima, Summer of '42 (71) -Oscar, su segundo, a la mejor música- The Other Side of the Midnight (77) o Yentl (83) -su tercer Oscar- son solo algunas de esas bandas sonoras dramáticas y románticas por las que tanto se significó. En MundoBSO tenemos comentadas más de un centenar de sus obras.
Fue un compositor emotivo que firmó bandas sonoras elegantes y refinadas, con mucha categoría. Fue también un gran músico de jazz y de canciones que triunfaron en televisión y la música comercial. Formó parte de una generación formidable de compositores (como Francis Lai, recientemente fallecido) y sus músicas no solo sirvieron para dar vida a las películas en las que se aplicaron sino que también atravesaron todas las barreras geográficas y temporales, porque ya son eternas. Él ha muerto, pero su música seguirá durante generaciones bien viva.