Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar tu experiencia y nuestros servicios, analizando la navegación en nuestro sitio web.
Si continuas navegando consideraramos que aceptas su uso. Puedes obtener más información en nuestra Política de Cookies.

Cerrar

THE LARGEST SITE OF FILM MUSIC REVIEWS IN THE WORLD! 23 YEARS ON INTERNET
37.101
BANDAS SONORAS
8.016
COMPOSITORES
7.514 OPINIONES DE USUARIOS
SÍGUENOS
USUARIO
 

EDITORIALES

CONÓCEME
CONSULTA ANTERIORES
ARCHIVO

EL VALOR DE LA FIRMA

24/11/2016 | Por: Conrado Xalabarder

Una anécdota apócrifa sobre Salvador Dalí cuenta que una millonaria norteamericana contrató sus servicios para que pintara y decorara la habitación de su difunto marido. Dalí la pintó y decoró toda (paredes, cortinas, cama, sábanas, muebles, suelo, techo, lámparas...) en absoluto negro. Al verlo, la millonaria se disgustó, pero entonces el genial ampurdanés señaló a una esquina inferior y le dijo: Usted lo que quería era eso, y ahí lo tiene. Era su firma en blanco reluciente y bien visible.

En el cine también sucede que para prestigiarse o para significarse se acude a firmas de relevancia para que colaboren en la película. A veces los resultados son espectaculares, pero otras veces no tanto, y en algunas ocasiones acaba siendo poco menos que un desastre. Hoy se estrena La reina de España, de Fernando Trueba, que entra en esta última y desgraciada categoría. Desgraciada además en sentido literal, pues es un comedia con escasa gracia, empeorada por una música sin ninguna. La banda sonora del polaco Zbigniew Preisner viene a ser como la gran firma de color blanco, aunque en esta ocasión la habitación negra (película) lo ha sido mas por la impericia de un director incapaz de abordar seriamente la comedia que del compositor, aunque no se le puede eximir de responsabilidad por el ridículo hecho. A diferencia de la millonaria norteamericana, parece que lo único que le ha interesado al director madrileño es tener la firma pero no la música del compositor, o al menos no ha sabido qué hacer con ella en su película.

Las razones del fracaso de esta creación musical se explican en la reseña que hoy mismo he publicado, y todo tiene la apariencia que Preisner se ha vendido como un mercenario musical para complacer a un director y sus ganas de tener a sus órdenes al autor de la trilogía de los colores y de tantos títulos célebres de Krzysztof Kieslowski, pero Preisner no sale mejor parado si todo lo que le ha importado de esta película ha sido que era dirigida por el ganador de un Oscar, o los honorarios percibidos. Su creación musical es, a mi juicio, lo peor que ha hecho nunca en el cine, y el ridículo profesional es, también a mi juicio, monumental.

Aunque no con resultados tan lamentables, algo parecido pasó el pasado año en el filme La novia, con la poco sustativa música de Shigeru Umebayashi, o tiempo más atrás con Pedro Almodóvar y sus colaboraciones con Ennio Morricone en Átame! (89) o Ryuichi Sakamoto en Tacones lejanos (91), operaciones todas cercanas al quiero tener caviar en mi película, aunque no sepa qué hacer con él. Porque no es que se quiera tener al compositor como Truffaut o De Palma quisieron a Herrmann para incorporar en sus filmes la musicalidad Hitchcock, por ejemplo, sino que se le trae a los créditos para exhibirlo como trofeo, un esnobismo que acaba por ser muy paleto, cuando los resultados artísticos conseguidos con ese fichaje están muy por debajo de los habituales en el compositor. Cierto es, también, que Trueba no es ni por asomo Truffaut o De Palma, por lo que tampoco podían esperarse grandes decisiones musicales de él.

No estoy defendiendo que Trueba o quien sea tengan que contratar a compositores españoles, pero sí que se haga algo respetable y digno con la música, porque no basta con tener a un compositor de firma reconocida para crear una buena banda sonora si todo lo que este acaba haciendo es lo de Salvador Dalí. Aunque sea muy cool y contar con él haga parecer el filme más interesante, el ridículo es todavía mayor. También para el compositor.

Compartir en
 
comentarios de los USUARIOS Deja un comentario
Deja un comentario
Atención Una vez publicado, el comentario no se podrá modificar. Publicar
No hay ningún comentario
 
de 0 a 5 Editoriales de 478
Siguiente
01/11/2024 | Por: Conrado Xalabarder
Contra todo pronóstico el documental Music by John Williams (Disney Plus) ha resultado tan excelente que bien podría ser considerado el mejor nunca hecho sobre música de cine y es opción viable para los próximos Oscar, al menos candidato
25/10/2024 | Por: Conrado Xalabarder
Hoy Netflix estrena la serie televisiva La última noche en Tremor (24), que marca la quinta colaboración entre su director Oriol Paulo con Fernando Velázquez, un binomino que es sólido y que debe ser señalado, referenciado y celebrado como ejemplar.
18/10/2024 | Por: Conrado Xalabarder
En este editorial hablo de Iglesias pero sobre todo debo hablar de Almodóvar, pues me parece claro que el compositor ha sido sustancialmente un mediador, un perfecto canalizador de la visión y la explicación del director sobre sus personajes.
11/10/2024 | Por: Conrado Xalabarder
La mejor manera de ver Strange Darling (23), que hoy se estrena, es no saber nada del argumento y entrar genuinamente en la experiencia que el director J.T. Mollner dispone y que obliga a la participación activa de la audiencia.
04/10/2024 | Por: Conrado Xalabarder
Hildur Guðnadóttir ha pasado de ser parte indisociable de Arthur Fleck/Joker a ser prescindible para el personaje, decepcionantemente.
de 0 a 5 Editoriales de 478
Siguiente